La catedrática de Ingeniería Química, Olga Guerrero, candidata al rectorado de la Universidad de Málaga (UMA), comparte su proyecto en una entrevista en Diario Sur. Guerrero, de 49 años y con experiencia como directora de secretariado durante ocho años, se presenta como una alternativa fresca y de futuro. Destaca su preocupación por la burocracia creciente, la falta de transparencia en las promociones y la necesidad de un enfoque diferente para abordar los desafíos de la UMA.
Guerrero propone cambios en la Fundación General, abogando por limitar gradualmente sus competencias y hacerla más eficiente para generar ingresos en lugar de costos. También cuestiona la participación de la UMA en la formación profesional, abogando por establecer vínculos pero sin impartir dicha formación. En cuanto a la oferta académica, aboga por un diseño estratégico de titulaciones basado en la demanda estudiantil y las necesidades del entorno empresarial.
La candidata también aborda la vivienda estudiantil, proponiendo mejoras en las instalaciones existentes y la posibilidad de involucrar a empresas en la construcción en terrenos del campus. Respecto al elevado déficit de la UMA, Guerrero propone un plan a largo plazo para reducirlo y limitar gastos, incluyendo recortes en la Fundación y en eventos costosos como Fancine. Además, aboga por reclamar fondos COVID a la Junta, destacando la necesidad de mejorar la transparencia y los parámetros de rendimiento para fortalecer la posición de negociación.
Guerrero defiende su independencia académica y profesional, subrayando que su vida no está vinculada a ningún partido político.
